Los Agentes de la Propiedad Inmobiliaria (API) son profesionales cualificados que ofrecen un servicio integral en la intermediación de bienes inmuebles. Sus funciones incluyen la mediación, tramitación, elaboración de informes, peritaciones y asesoramiento en temas relacionados con propiedades inmobiliarias, por las cuales perciben honorarios.
Con el Decreto de Medidas Liberalizadoras de junio del 2000, se eliminó el examen que, junto con una diplomatura universitaria, era el requisito para obtener el título de API. Desde entonces, no se han convocado nuevas pruebas, lo que ha liberalizado la profesión. Esto ha generado la necesidad de un mayor conocimiento del sector, ya que algunas personas que ingresan en la profesión lo hacen movidas únicamente por intereses económicos, sin la formación adecuada.
En cuanto a las funciones de los Agentes de la Propiedad Inmobiliaria, el Decreto 3248/69, de 4 de diciembre de 1969, que aprueba el Reglamento de los Colegios Oficiales de Agentes de la Propiedad Inmobiliaria y de su Junta Central, establece que los API tienen como funciones propias la mediación y corretaje en operaciones como compraventa y permuta de fincas rústicas y urbanas, préstamos con garantía hipotecaria, arrendamientos, cesiones y traspasos, y consultas sobre el valor de inmuebles.
A continuación, se detallan algunas de las actividades que se pueden desarrollar en una Agencia Inmobiliaria:
- Compraventa de todo tipo de inmuebles.
- Opciones de compra de bienes inmuebles.
- Permuta de bienes inmuebles.
- Arrendamiento de bienes inmuebles.
- Cesión y traspaso de derechos de arrendamiento.
- Constitución, cesión, subrogación y renovación de préstamos con garantía hipotecaria o personal.
- Aportación de bienes inmuebles y derechos inmobiliarios en sociedades u otros tipos de participaciones.
- Subastas de bienes inmuebles.
- Mediación en la captación de recursos financieros para la inversión en bienes y derechos inmobiliarios.
- Traspaso de locales de negocio.
- Promoción, gestión y administración de comunidades de propietarios y cooperativas inmobiliarias.
- Tramitación y promoción de operaciones inmobiliarias ante organismos estatales, autonómicos, provinciales o municipales.
- Tramitación de expedientes de Viviendas de Protección Oficial o libres.
- Peritación y valoración de inmuebles y derechos inmobiliarios de cualquier tipo.
No todos los API ofrecen necesariamente todos estos servicios.
La amplitud de materias que un Agente de la Propiedad Inmobiliaria debe conocer es considerable para desempeñar su labor de forma efectiva. Además, es esencial mantenerse actualizado, ya que la normativa, las exigencias de los clientes y los métodos de venta están en constante evolución.